—Dame la mano, pequeño, te llevaré a un lugar precioso.
—¿Hay cachorritos?
—Sí, y puedes jugar con ellos.
—¿Vendrá mamá?
—Claro, pero vamos yendo nosotros y le damos una sorpresa cuando llegue.
—¡Vale!
Al día siguiente, en cada farola de la ciudad había una foto con la cara del pequeño.
Microrrelato para el reto «Emociones en 50 palabras» de octubre de Sadire Lleide. Requisitos: escribir un microrrelato o poesía inspirado en la imagen o el sonido que os proponga en tan solo 50 palabras.
Una imagen muy lamentable que se repite muy seguido en las ciudades del mundo. Que sirve de ejemplo a los padres para que tengan más cuidado con sus pequeños.
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Más de lo que creemos, cuando veo las cifras de desaparecidos siempre me asombro (y angustio).
Gracias por pasar, Macalder. 🙂
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¡Llegaste!
Terrible, cruento y, por desgracia, real.
Gracias por participar, Luna!!! 😘
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Gracias a ti por la organización, ¡que es más trabajo! 🙂
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Terrible realidad, Luna.
Abrazos.
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Es horrible y un tema que me angustia bastante…
Gracias por la visita. 🙂
Un abrazo
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Bufff… Qué mal lo paso con estas historias. Buen micro, Luna.
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Yo también, pero a la inspiración le ha dado por ahí… Muchas gracias, Mayte.
Un besote
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Duro y tristemente real. Has contado todo sin decir apenas nada. Enhorabuena, Luna.
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Gracias, Capitán. La angustia que se debe sentir al desaparecer un ser querido debe de ser infinita.
Un abrazo
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¡Macabro!
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Sí, también diario, lamentablemente…
Gracias por pasar, Fabio.
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Uffffff, Luna
En tan pocas palabras, ¡qué potente carga!
Besos
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Gracias, Evavill. 😉
Hay situaciones que hablan por sí solas y no necesitan apenas palabras…
Un besote
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Excelente micro Luna aunque nos has dejado con el alma en un vilo. Cruda realidad por desgracia. Hoy me he pasado un ratito a ver que se cuece por aquí. Un abrazo.
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Un placer verte por aquí, muchas gracias. 🙂
Espero que todo vaya bien. Un abrazo, Carlos
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Precisamente por lo que comentas hice yo la versión inversa en el mío.
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Anda, lo leí pero no lo recordaba. Pues hacemos que primero ocurra mi micro, luego el tuyo y que el niño sea el mismo. 🙂
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Vale, así al menos en esta ocasión, el final será el deseado y con la pareja de secuestradores a un árbol bien esposados.
Tú los diálogos y yo la acción 😂😂🥂👍
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La angustia que nos acosa desde la presencia del alma asesina. Un relato tremendo Luna. Un besazo.
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Muchas gracias, Carlos. Y esa angustia ya no se pierde, ¿no?
Un besote
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¡Más o menos!
Otro beso.
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La duda de saber el estado de un desaparecido es terrible, porque las certezas más dolorosas duelen menos que la incertidumbre.
Triste relato, Luna, pero con tu sello particular, como siempre, fantástico.
Besiños palmeiráns.
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Estoy de acuerdo contigo por completo, la incertidumbre es imposible hacerle frente, la angustia que provoca ni me la imagino.
Muchas gracias, Magdalena, y un besazo enorme
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Me ha dejado angustiado. Corto, potente y desgarrador. Un abrazo.
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Creo que algo a lo que quienes tenemos hijos le tenemos mucho miedo, aunque no siempre esté presente. Por eso este micro impacta tanto, nuestra imaginación lo visualiza y… buf.
Muchas gracias, Raúl. Un abrazo
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Hola. Aún me sigue doliendo todo después de leer el relato. Uno no se siente bien después de enterarse de semejante engaño.
Gracias por ilustrar esa situación que sucede más veces de las que pensamos. Saludos y buen día.
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Hola, yo cada vez que veo las cifras de desaparecidos me asombro, cantidad de casos diarios que no aparecen en ningún medio. Es horroroso.
Muchas gracias. 🙂
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tristemente real….
una imagen muy bonita!
buen fin de semana 🙂
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Muchas gracias. 🙂 ¡Igualmente!
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Un puñado de palabras bien puestas para decir tanto… Excelente, Luna.
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¡Muchas gracias, Poli! Un abrazo
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Será la sensibilidad de mi día…
Me has hecho llorar, es una triste realidad Luna.
Un beso.
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Es que es algo terrible, la incertidumbre de no sabe dónde ni cómo estará alguien a quien quieres, y más si es un niño… no hay palabras para describirlo.
Un fuerte abrazo
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Yo creo que enloquecería, pobres de los que hayan sufrido ese trance.
Un abrazo Luna. 🌹😘💝🙋🏼♀️
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Yo también. Como dice Magdalena en su comentario: «las certezas más dolorosas duelen menos que la incertidumbre». Estoy completamente de acuerdo.
Otro abrazo para ti. 🙂
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