Emblanquecen los altos las nevadas,
tiritan las aceras,
ruge el río implacable hacia su mar.
Solo las hojas nos relatan, estremecidas,
que aún es otoño.
Emblanquecen los altos las nevadas,
tiritan las aceras,
ruge el río implacable hacia su mar.
Solo las hojas nos relatan, estremecidas,
que aún es otoño.
Luna Paniagua 
Y parece que será un otoño atípico. Un besazo.
Creo que el descenso de vuelos permititrá que la atmósfera busque un nuevo equilibrio. ¡Retemblando estamos!
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De hecho, por aquí ha templado un pelín, ahora que sí le toca ir llegando al invierno. 🙂
Gracias, Carlos. Un besote
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Llega el invierno sin más ni más. Hola Luna. Me gustó tu poema.
Manuel Angel
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Muchas gracias, Manuel. Y como viene se va, una ya no sabe qué esperar (ni qué ponerse, je, je).
Un abrazo
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Las estaciones se van muy pronto sobre todo si la pasamos bien. Buenas noches Luna.
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Bravo!! Me ha gustado mucho este poema de fin de otoño.
Besos
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¡Muchas gracias! Un besote. 🙂
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Querida Luna, tienes una capacidad ilimitada para la creatividad, sea el texto largo o conciso, sabes entrar con eficacia en el lector.
Besiños palmeiráns, recordada Uxue.
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Muchas gracias, Magdalena. La inspiración me lleva por donde quiere, je, je.
Espero que estéis todos bien, ¡besazos!
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Cinco líneas impresionantes… ¡Bellísimas! ¡Qué poco necesitas para decir tanto
Un abrazo grande.
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Muchísimas gracias, Carmen. Es el rinconcito de la foto, que me inspiró. 🙂
Besazos
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Se me ha ido sin cerrar la interrogación.
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Qué preciosa descripción de un otoño atípico, Luna. Por estas coordenadas la despedida otoñal es rara: doce grados en el exterior, un cielo de brillante azul metálico cubierto de nubecillas que no consiguen amortiguar el resplandor y, gracias a un batallón de operarios armados con ruidosos sopladores, ni una hoja que te de pistas de la estación en la que estamos. Un besote.
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Me temo que aquí las hojas y el viento desesperan a los operarios, je, je. La imagen es dentro del pueblo, te podrás hacer una idea…
Muchas gracias por sacar un ratito para mí, que ya sé que no está fácil. 😉
¡Besotes!
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Precioso, Luna.
Fuerte abrazo.
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¡Muchas gracias! Un abrazo. 🙂
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¡Precioso! Enhorabuena.
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¡Muchas gracias!
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Y aún tiene que llegar el invierno … Has clavado esa sensación del final del otoño, ese aviso de que el frío aún nos acompañará durante unos meses. Un abrazo.
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Ahora nos ha dado una pequeña tregua, pero ya no nos fiamos, je, je. Muchas gracias, Raúl.
Un abrazo
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