CONVERSACIÓN EN EL CEMENTERIO
—Y los muertos aquí lo pasamos muy bien, entre flooores, de colooores…
—Cállate.
—Hay que ver qué mal humor se te pone siempre el Día de Muertos. Anímate, hombre, podemos salir a pasear y mira qué bonito está todo.
—Todo, no. Nuestras tumbas están como siempre. Nadie viene a vernos ni nos pone flores ni calaveras de dulce ni nada. Es deprimente.
—¿No irás a llorar?
—Tú me dirás cómo. Hace mucho que no tenemos lagrimales, no somos más que huesos.
—Era una broma, a ver si te animabas un poco.
—Ya. Ja. Ja.
—En fin, fue mala suerte que muriéramos en México. Seguir leyendo